Esther García. Maestra de Ed. Infantil y miembro del equipo «Somriu en las aulas» del colegio.
La etapa de Educación Infantil inicia el mes de noviembre con “la caja de la calma” en
todas sus aulas. El colegio continua implantando metodologías innovadoras en la
educación para la gestión emocional.

Hace ya unos 7 años, un grupo de docentes del colegio, iniciábamos un curso de formación
para mejorar nuestra intervención educativa a la hora de ayudar a nuestros pequeños y
pequeñas en su gestión emocional.
El programa SOMRIU, ofrecía a los asistentes herramientas sencillas para poner en práctica
dentro y fuera del aula, tanto con uno mismo como con sus alumnos, a fin de facilitar el
autoconocimiento, autocontrol y autocuidado.
Desde entonces el programa ha evolucionado mucho, dando pasos de gigante e implantándose
en todas las aulas de nuestro centro.
Hace dos semanas se presentaba en infantil la caja de la calma. Se trata de una caja presente
en cada aula, cuyo objetivo primero es ayudar a los más pequeños a gestionar la rabia,
derivada en la gran mayoría de las ocasiones a la baja tolerancia a la frustración.
La caja contiene numerosos elementos como reloj de arena, bola geométrica, antifaz, pluma
sensorial, saquito aromático… Dichos elementos se introducen poco a poco, según el momento
evolutivo del grupo, para procurar un uso funcional y de éxito.
Así pues, el trabajo consiste en ayudar a los niños y niñas a localizar en sí mismos ese
momento en el que empezamos a sentir enfado, para poder acudir a la caja de la calma y
respirar acompañados de algún elemento que nos ayude a centrarnos en nosotros, nuestro
cuerpo, el sonido de nuestra respiración… evitando así llegar a rabietas descontroladas fruto de
la ira.
No se trata, por tanto, de evitar que los niños sientan enfado o disgusto, sino de ayudarlos a
sentir todo eso de manera controlada para conversar y pedir ayuda desde la calma, la
tolerancia y el equilibrio.